La psicóloga sanitaria Silvia Muñoz atiende ahora a sus pacientes por vías telemáticas, tomando parte también en el asesoramiento y cobertura a las víctimas de la violencia de género | En esta pandemia nadie se sienta en el diván a contar a Silvia sus problemas, ahora el contacto está al otro lado de la pantalla del ordenador.
El día a día de Silvia ha cambiado. Por la consulta de esta psicóloga leonesa ya no pasan pacientes que se reclinen en el diván. Ahora están al otro lado de la pantalla en lo que se conoce como telepsicología.
Para esta profesional la actividad no para en el estado de alarma, aunque ahora la ayuda sea a distancia. No obstante avisa, queda lo que vendrá para prepararse.
«Yo pienso que lo peor está por venir, ahora vivimos la crisis, lo urgente, las personas que está en primera linea están en esa intensidad, pero cuando todo pase e intenten asimilar todo vendrán los pensamientos y emociones», explica.
En estos momentos la consulta se apoya fundamentalmente en el teletrabajo, ya que como confiesa «no podría ser de otra manera por seguridad». Las consultas se han reducido durante la pandemia, «pero aquellos que lo demandan ahí nos tienen».
Ya no hay quien se siente el diván, pero Silvia confiesa que con el ordenador se puede pasar consulta. «Hay determinadas técnicas, en general sí se puede hacer, para el profesional no es extraño, aunque quizá sí lo es para el que está al otro lado». La telepsicología, como se llama la fórmula, tiene bastante aceptación en grandes ciudades.
En esta nueva modalidad los problemas de los pacientes, en ocasiones, se ven agravados por el confinamiento. «Esta situación añade variables excepcionales en su vida cotidiana, alguien que tiene una patología le va a costar más».
Violencia de género
Silvia Muñoz forma parte del equipo de profesionales que dan asistencia a las mujeres víctimas de violencia de género. Un servicio ofrecido a través de un convenio entre el Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León y las administraciones por el que se les da cobertura y asistencia.
Una parte de su trabajo que no ha visto freno en el confinamiento. «En este apartado no hemos parado, cuando hay una denuncia los compañeros han ido a intervenir. Los expertos nos informan y alertan».
Hay un punto que la profesional leonesa recuerda. «Las personas mayores, no solo las que están en las residencias, sino las que están solas, pueden tener ciertos problemas. Ese aislamiento social y la reducción de estímulos veremos a ver cómo afecta», lamenta.
Eso sí. La clave sigue siendo acudir al especialista. «Todos sabemos a qué médico ir cuando se nos rompe un hueso. Con los psicólogos pasa lo mismo, porque con la buena voluntad no es suficiente para curar».
Sobre si son héroes, Silvia niega la mayor. «No tenemos que sacar ninguna fuerza especial, nos sale natural porque estamos para ayudar».
La psicóloga leonesa sigue ayudando y trabajando con aquellos que lo necesitan, aunque ahora el diván sea la pantalla del ordenador y el cara a cara se haga a distancia.
Fuente: LeonNoticias
